PINTAR LA MONA

Esta locución se usa para expresar que alguien no hace nada, que estorba o que está fuera de lugar o de más. También que holgazanea, hace el vago o que pasa el tiempo aburrido y de forma inútil. El término "pintamonas" del cual deriva éste se refiere a alguien que tiene poca trascendencia a pesar de presumir de ella o cuando hablamos de un pintor de poca monta.

Esta expresión proviene de un juego de cartas llamado “La mona”, que consiste en un juego de parejas en la que los distintos jugadores siempre que tengan una pareja de cartas del mismo número (independientemente de su palo) se descartan. El juego consiste en robar una carta a tu jugador más cercano y, en función de esta carta, proceder al descarte correspondiente en caso de que haya una nueva pareja. La mona es una carta conocida de antemano y no es más que una carta que no tiene pareja, de manera que cuando robas la mona o la tienes en tu poder no puedes hacer nada con ella ya que no te permite descartarte cartas. El jugador que pierde es aquel que permanece al final del juego con esta carta. Con lo cual se queda pintando la mona que es la carta solitaria. El lenguaje coloquial le dio el sentido de ser impar, sobra o, ser inútil.