Esta es una expresión carácter onomatopéyico, utilizada para indicar indiferencia, falta de entusiasmo del hablante o desinterés por algo cuando ese algo no provoca ni emoción ni aprecio, cuando ni nos ha gustado ni nos ha disgustado. Es decir, se utiliza para expresar que no es una cosa ni su contraria, ni bueno ni malo, que es algo normalito. Es una locución similar a otras muchas como “ni chicha, ni limoná” o “ni carne, ni pescado”.
La primera referencia de esta expresión apareció en 1875 en una crónica taurina para hacer una crítica de la faena de un torero. Parece ser que su origen procede de “fu”, primera sílaba de fulastre (chapucero) y “fa” primera sílaba de fabuloso, con lo que la expresión podría traducirse como: “ni malo, ni bueno”.
Cap comentari:
Publica un comentari a l'entrada